Un hacker instala un servidor de Minecraft en una bombilla inteligente con un chip RISC-V de 192 MHz y solo 276 KB de RAM, usando su propio microservidor Ucraft de apenas 90 KB.
La creatividad de la comunidad tecnológica no tiene límites. El hardware hacker conocido como Vimpo ha conseguido algo que roza lo absurdo y lo brillante a la vez: instalar y ejecutar un servidor de Minecraft en una bombilla inteligente barata comprada en AliExpress.
El dispositivo, que en principio no debería servir para más que iluminar una habitación, integra un microcontrolador BL602 con arquitectura RISC-V, un único núcleo a 192 MHz, 276 KB de RAM y 128 KB de ROM. Suficiente, al parecer, para mantener un diminuto mundo de Minecraft de apenas 90 KB funcionando.
De bombilla a servidor
El experimento comienza con una escena poco convencional: Vimpo abre la bombilla con un cuchillo —sin mayor consecuencia, dado que las LED no requieren vacío interno— y desuelda el microcontrolador del centro del circuito, rodeado por los diodos de luz.
Tras liberar el chip, el hacker soldó cables a los pines de conexión y verificó que aún podía encender y apagar el sistema. Luego añadió un adaptador USB a serie, creando una interfaz estable con la que interactuar desde el ordenador.
De esta forma, lo que antes era una simple bombilla se transformó en un microservidor funcional.

Ucraft, el mini Minecraft hecho a mano
La hazaña técnica no se limita al hardware. Para que el juego pudiera correr en semejante limitación de recursos, Vimpo desarrolló un software llamado Ucraft, una implementación ultraligera de servidor de Minecraft disponible en GitHub.
Según explica, el binario básico ocupa apenas 46 KB sin autenticación y 90 KB si se añade la biblioteca de seguridad. En las condiciones más exigentes —con hasta 10 jugadores conectados—, el consumo de memoria alcanza unos 70 KB.

Eso sí, el propio creador admite que Ucraft carece de la mayoría de las funciones del servidor oficial, por lo que se trata más de una demostración técnica que de una experiencia jugable completa.
Minecraft, el nuevo “Doom” de los experimentos tecnológicos
La comunidad ha convertido Minecraft en el nuevo referente de la informática creativa, del mismo modo que Doom lo fue en los noventa. En los últimos meses se han visto proyectos igual de extravagantes: desde un modelo de ChatGPT con cinco millones de parámetros integrado en Minecraft, hasta versiones corriendo en viejas GPUs con solo 8 MB de VRAM, o incluso servidores implementados en COBOL de hace más de seis décadas.
Vimpo, con su bombilla-servidor, acaba de sumar un nuevo capítulo a esa larga lista de experimentos que demuestran una cosa: cuando se trata de Minecraft, el límite no está en el hardware, sino en la imaginación.












