Las ventas físicas de videojuegos y consolas en Estados Unidos registraron en noviembre de 2025 su peor nivel desde 1995, con fuertes caídas en hardware, accesorios y juegos, según datos de Circana.
Noviembre suele ser uno de los meses más fuertes del año para la industria del videojuego en Estados Unidos. El impulso del Black Friday, sumado al inicio de la temporada navideña, históricamente ha convertido a este periodo en un termómetro clave del estado del mercado. Sin embargo, noviembre de 2025 rompió esa tendencia de forma alarmante.
Según el más reciente informe de Circana, compartido por su director ejecutivo Mat Piscatella, las ventas físicas de videojuegos y el gasto en hardware en Estados Unidos fueron las más bajas registradas para un mes de noviembre desde 1995. En total, el gasto combinado en videojuegos, consolas y accesorios alcanzó los 5.900 millones de dólares, lo que representa una caída interanual del 4 % frente a noviembre de 2024.
El hardware, el gran golpeado
El desplome más severo se dio en el segmento de hardware. El gasto en consolas cayó hasta los 695 millones de dólares, un 27 % menos que el año pasado. Este dato convierte a noviembre de 2025 en el segundo peor mes de noviembre para ventas de hardware desde 2005, solo por detrás de aquel año, cuando el gasto fue de 455 millones.
En unidades, la situación es igualmente preocupante: se vendieron 1,6 millones de consolas durante el mes. El único noviembre con cifras inferiores fue el de 1995, cuando se despacharon 1,4 millones de unidades, una época completamente distinta para la industria, previa a la popularización masiva del videojuego moderno.
Al analizar por plataformas, la caída es generalizada, aunque con diferencias notables:
- Xbox Series X|S registró un desplome del 70 % respecto a noviembre de 2024.
- PlayStation 5 cayó un 40 % interanual.
- Nintendo Switch, incluso con la presencia de Switch 2 en el mercado, bajó un 10 %.
Accesorios y juegos físicos también a la baja
El gasto en accesorios tampoco escapó a la tendencia negativa. En noviembre se invirtieron 327 millones de dólares en este segmento, un 13 % menos que el año anterior. Los mandos fueron los más afectados, con una caída del 19 % en gasto.
El único apartado que mostró un crecimiento fue el de contenido digital (juegos, DLC y microtransacciones), con un leve aumento del 1 % interanual. Aun así, las ventas físicas de videojuegos continuaron su declive: bajaron un 14 % respecto a noviembre de 2024, marcando otro mínimo histórico para este mes desde que se tienen registros en 1995.
US video game hardware total units sold and average price paid, Nov 1995 through Nov 2025.
— Mat Piscatella (@matpiscatella.bsky.social) 17 de diciembre de 2025, 11:30
El precio de todo, el gran problema
Para Piscatella, el contexto económico es clave para entender estas cifras. En declaraciones a IGN, el analista explicó que el aumento generalizado del costo de vida y, en particular, el encarecimiento del hardware y los videojuegos, está empezando a pasar factura incluso a los consumidores con mayor poder adquisitivo.
“Durante un tiempo, el gasto se mantuvo gracias a los consumidores más acomodados, compensando la caída en los segmentos menos favorecidos”, explicó Piscatella. “Pero quizá estamos empezando a ver el impacto real de los precios elevados en productos caros como las consolas”.
El analista también advirtió sobre el impacto que podría tener la actual crisis de precios en la memoria RAM y otros componentes clave. Si los costos siguen subiendo, no solo las consolas, sino también los PC gaming, podrían encarecerse aún más en los próximos meses, con consecuencias potencialmente “devastadoras” para el mercado de dispositivos dedicados al videojuego.
Un dato ilustra bien el problema: en noviembre de 2019, el precio promedio de una consola en EE. UU. era de 239 dólares. En 2025, incluso con hardware que ya pertenece oficialmente a la generación anterior, el precio promedio se sitúa en 439 dólares.
¿Un bache puntual o el inicio de una tendencia?
Todavía es pronto para saber si noviembre de 2025 fue un mes excepcionalmente malo o el inicio de una tendencia más profunda. Las cifras de diciembre, que se conocerán en enero de 2026, serán clave para confirmar si el mercado logra recuperarse durante la campaña navideña.
Lo que sí parece claro es que, mientras los salarios no acompañen el ritmo del aumento de precios y la tecnología siga encareciéndose, una parte creciente del público quedará fuera del acceso al hardware más reciente.
Battlefield 6 domina el año, Call of Duty lidera noviembre
En cuanto al software, noviembre dejó una curiosa lectura competitiva. Call of Duty: Black Ops 7 fue el videojuego más vendido del mes en Estados Unidos, pero no logró entrar en el top cinco de ventas acumuladas del año.
Ese honor sigue perteneciendo a Battlefield 6, que se mantiene como el juego premium más vendido de 2025 en el país y fue además el segundo más vendido del mes de noviembre. Una señal clara de que su impulso comercial no se ha debilitado.

Aún es temprano para confirmarlo, pero todo apunta a que Battlefield 6 podría cerrar el año como el shooter más vendido en Estados Unidos, superando a Call of Duty, algo impensado para muchos hace apenas unos años.
La respuesta definitiva llegará en 2026, cuando los números finales confirmen si este noviembre fue una anomalía… o una advertencia seria para el futuro de la industria.









