Según Microsoft, el «periodo de inicio previsto» de la próxima generación de consolas es 2028.
Al parecer, Microsoft espera que la próxima consola Xbox y la PS6 se lancen en algún momento de 2028, según documentos judiciales revelados recientemente.
Según informa IGN, Microsoft afirmó durante su primer día en los tribunales con la FTC que el «periodo de inicio previsto» de la próxima generación de consolas para, digamos, empezar es 2028. De ser cierto, eso significaría que se espera que la actual generación de consolas, que incluye la PS5, la Xbox Series X y la Xbox Series S, dure unos ocho años.
Microsoft presentó un documento de 77 páginas ante un tribunal estadounidense en defensa de su oferta de compra de Activision Blizzard, que la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. pretende detener.
IGN ha revisado el documento y ha observado que Microsoft alude a una posible fecha de lanzamiento en 2028 para las consolas de nueva generación. El tema surge cuando Microsoft expone sus conversaciones con Sony sobre un acuerdo de 10 años para mantener la franquicia Call of Duty de Activision en la plataforma PlayStation.
Microsoft ofreció el plazo de 10 años con la esperanza de que Sony dejara de luchar contra su oferta de compra de Activision. Curiosamente, la empresa señala a continuación: «En cualquier caso, este plazo iría más allá del periodo previsto de inicio de la próxima generación de consolas (en 2028). Así pues, Call of Duty se publicará en las consolas PlayStation sucesoras en caso de que se lance una durante la vigencia del acuerdo.»
La audiencia es la primera del intento de la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. de presentar una orden judicial preliminar contra Microsoft y Activision, que pondría en pausa el acuerdo mientras la FTC revisa su conformidad con la legislación antimonopolio estadounidense.
Aunque la demanda de la FTC es sin duda el mayor obstáculo al que se enfrentan actualmente Microsoft y Activision, el camino que tienen por delante también es cuesta arriba en otros aspectos. Por ejemplo, el Reino Unido bloqueó formalmente la transacción en abril, y se espera que Microsoft y Activision apelen la decisión. Mientras tanto, la UE aprobó la compra en mayo, lo que supuso una victoria significativa, aunque no definitiva, para las dos empresas, que esperan que el acuerdo se complete a finales de este mes.
Mientras tanto, Sony ha dicho que no revelará información sobre la PS6 a Activision si la compra por parte de Microsoft llega a buen puerto. Obviamente, eso significaría que las características exclusivas de la próxima PlayStation probablemente no se incorporarían tan a fondo en los juegos de Activision como lo harían con los editores que no son propiedad del principal competidor del fabricante de consolas.
El consejero delegado de PlayStation, Jim Ryan, dijo a la FTC que no podía dar información «inmensamente sensible» sobre su próxima consola a una empresa propiedad de Xbox.