Al comprar un procesador Intel, una de las principales consideraciones es si quieres hacer overclocking o planeas seguir con los ajustes de stock. Si quieres hacer overclocking, debes comprar una CPU serie K desbloqueada para que puedas ajustar el multiplicador en la BIOS para aumentar la velocidad de los relojes. De lo contrario, una CPU que no sea de la serie K con un multiplicador no ajustable (bloqueado) te ahorrará un poco de dinero. ¿Pero qué pasa si quieres ahorrar algo de dinero y hacer overclocking? La tecnología «Base Frequency Boost» de ASRock puede hacer posible el overclocking de esas CPUs Intel bloqueadas.
Una diapositiva filtrada destacando la ingeniosa solución recientemente apareció en Videocardz, y ahora ASRock está abiertamente haciendo alarde de su truco.
«La tecnología ASRock BFB (Base Frequency Boost) permite a los usuarios instalar CPUs que no sean de la serie K en determinadas placas base de las series ASRock 300 y 400 (incluso en modelos no Z) y disfrutar inmediatamente del aumento de la frecuencia base con el poder oculto de los procesadores», dice ASRock.
El rendimiento puede variar, pero la forma en que esto funciona es mediante el TDP, o punto de diseño térmico, de una CPU Intel. El valor asignado es un índice en vatios con el que un CPU particular funcionará mientras esté bajo carga por períodos prolongados. Esto también se conoce como una clasificación PL1 (nivel de potencia uno). También hay una clasificación PL2, que designa el vataje de los impulsos de frecuencia a corto plazo.
Al alterar el valor de PL1, ASRock está esencialmente engañando a la CPU para que funcione a una frecuencia base más rápida de lo que lo haría de otra manera. Por ejemplo, el Core i9-10900 es un CPU de 65W con un reloj base de 2,8GHz. El mecanismo BFB de ASRock empuja el TDP por encima de su configuración predeterminada, hasta 125W, momento en el que la CPU aparentemente piensa que debería funcionar a 3,7GHz.
Ése es un overclock generoso de 900MHz. E igualmente significativo, esto esquiva la restricción de overclocking de Intel y hace posible un salto de frecuencia que de otra manera no sería alcanzable en un procesador de la serie no-K.
Como suele ser el caso cuando se hace overclocking, la salvedad es el enfriamiento.
«Mientras que ASRock BFB da vida a las CPU que no son de la serie K y a las placas madre que no son de la serie Z, la frecuencia del impulso todavía depende del sistema de refrigeración aplicado en su equipo», afirma ASRock.
En otras palabras, es improbable que veas el beneficio total de esta solución cuando uses un disipador de serie. Al igual que con el overclocking tradicional, cuanto mejor sea el disipador, mejores serán los resultados. En teoría, de todos modos, aún no hemos tenido la oportunidad de probar esto nosotros mismos.
ASRock lo está implementando en ciertas placas base LGA 1200 (Z490, H470 y B460) para Comet Lake, así como en algunas de sus placas base LGA 1151 de la generación anterior (Z390 y B365) para Coffee Lake. Hay más de dos docenas de modelos de placas madre en total. Todas ellas requieren descargar y flashear la última BIOS, y es concebible que se puedan añadir más a la lista.