Operar dentro del volátil mercado de las criptomonedas te puede generar considerables ingresos o enormes perdidas, y si quieres tomar las decisiones correctas, debes comprender cómo hacer un análisis técnico. A continuación te explicamos algunos conceptos fundamentales que te ayudaran a interpretar de forma acertada la información de los gráficos de precios.
Si eres nuevo en el mercado de criptomonedas y en el mercado de trading en general, puedes sentirte abrumado por la forma en que se presenta la información. Muchos intercambios y sitios web proporcionarán gráficos detallados junto con sus gráficos de precios y predicciones de precios, analizando la forma en que se comporta el mercado. Si bien un glosario de términos comunes puede ayudarte a adentrarte en la jerga técnica, vale la pena profundizar un poco más en lo que muestran estos gráficos, para que puedas monitorear el aumento y la caída de las criptomonedas con mayor precisión.
¿Qué es el análisis técnico?
Un análisis técnico es un término general utilizado cuando tomas datos existentes del mundo real del mercado de criptomonedas e intenta trazarlos con la esperanza de predecir hacia dónde irá. En el mejor de los casos, esto te permite pronosticar cuándo el mercado será bajista (bearish, tendencia a la baja) o alcista (bullish, tendencia a la alza). Si se predice correctamente, esto te permite comprar cuando el precio del mercado es bajo (buying on the dip, comprar en la caída) y vender cuando es alto para obtener ganancias.
Como este es el deseo de la mayoría de los operadores (traders), a menudo vemos correcciones naturales en los precios durante períodos cortos que no interrumpen las tendencias generales observadas en períodos largos. Si el mercado es alcista durante un período de tiempo considerable, la demanda reducirá la oferta de monedas para la venta y el precio aumentará. A medida que el precio sube, puedes esperar que el mercado se vuelva bajista en algún momento mientras la gente trata de capitalizar vendiendo sus monedas. A la vez que venden, la oferta comienza a superar la demanda, causando que el precio baje.
Estas correcciones de curso pueden ocurrir en cuestión de días, si no de horas, y son lo que los operadores diarios (day traders) buscan con el fin de obtener un beneficio. Sin embargo, aquellos que persiguen victorias a más largo plazo analizarán períodos más largos – semanas, meses o años – en busca de orientación útil sobre tendencias generales alcistas o bajistas. El análisis técnico evita que se venda con pánico en una bajada de precios que en realidad puede ser sólo una corrección natural a un período de subida de precios al alza.
Hacer un análisis técnico de una moneda te ayuda a leer el mercado. Implica examinar las tablas y gráficos de precios de diferentes maneras, y busca encontrar un consenso dentro de esa información para ayudarte a predecir hacia dónde se dirige el mercado. En esta guía, vamos a revisar los elementos más comunes que verás en un cuadro y explicar cómo funcionan los indicadores, qué te están diciendo y cómo se entrecruzan entre sí.
Antes de comenzar, también es importante recordar que no se puede predecir con total seguridad lo que sucederá en el futuro. Un análisis técnico utiliza lo que ya ha ocurrido para intentar predecir las tendencias del mercado, pero nada es seguro; especialmente en el mercado de las criptomonedas, donde los medios de comunicación, las personas influyentes, las ‘ballenas’ (whales, traders acaudalados que pueden comprar/vender grandes volúmenes) y los gobiernos pueden tener un impacto tan repentino y significativo en el precio.
¿Cómo funcionan las velas o ‘candlesticks’?
Uno de los primeras incógnitas que probablemente encuentres cuando comienzas a explorar gráficos de precios son las ‘velas’ o candlesticks. Estos son los objetos con forma de rectángulo de color verde o rojo en un gráfico de velas (un tipo de gráfico muy utilizado en el análisis técnico bursátil), con líneas que salen de la parte inferior y superior. La forma rectangular con la línea saliendo fuera de la parte superior se asemeja a una vela (candlestick), de ahí el nombre. Pero, ¿qué te está indicando?
El rectángulo en sí muestra la brecha entre el saldo de apertura y cierre de esa moneda durante el período que estás buscando. Por lo tanto, si estás visualizando el precio de una moneda por día, entonces la parte coloreada rectangular de cada vela te muestra la diferencia entre el saldo inicial para la negociación de ese día y el saldo final de ese día.
Si la vela es verde, la parte inferior de ese rectángulo muestra el precio de apertura, y la parte superior de ese rectángulo muestra el precio de cierre. El color verde es bueno porque significa que el valor de tu moneda aumentó durante ese día.
Si la vela es de color rojo, significa que el precio de apertura está en la parte superior, y el precio de cierre está en la parte inferior. Esto obviamente es una mala noticia ya que significa que el valor de la moneda disminuyó durante el día. Sin embargo, hay otros aspectos a tomar en cuenta.
Las «mechas» que salen del rectángulo en la parte superior e inferior muestran el rango de precios más alto y más bajo dentro de ese día. Por ejemplo, durante un período de 24 horas, una moneda puede haberse abierto a 1 dólar y cerrado a 2 dólares. Sin embargo, en algún momento durante el día puede haber bajado a 50 centavos y subir tan alto como 3 dólares. Esta es información útil, ya que muestra cuán volátil es el mercado dentro de cada período de 24 horas, y no solo los precios de apertura y cierre.
Cuanto más volátil sea el mercado, mayor será la posibilidad de que la ganancia (o pérdida) que sufrió tu moneda en el transcurso del día continúe o se corrija en el siguiente día de negociación. Esto se debe a que muestra si el mercado se está expandiendo hacia abajo más de lo que se está expandiendo hacia arriba o viceversa. También puede mostrar si el mercado se está consolidando. Esta información puede darte una indicación de si es probable que una moneda tienda al alza o a la baja.
Imagina un escenario donde la mecha en la parte superior de la vela es muy corta. Esto sugeriría que la moneda está en alza ya que cerró cerca de su precio más alto registrado para el día. Si la mecha en la parte superior era larga, mostraría que, en algún momento durante el día, el precio de la moneda era mucho más alto, pero la gente comenzó a venderla para obtener un beneficio. Esto sugeriría que el mercado está a punto de hundirse o tornarse bajista.
Por el contrario, si la mecha en la parte inferior de una vela es corta, sugiere que la gente sigue vendiendo la moneda. Esto se suma a la oferta y sugiere que el precio probablemente baje aún más. Sin embargo, si la mecha en la parte inferior es bastante larga, sugiere que el precio de la moneda ya ha bajado, y la gente ha comenzado a comprarla de nuevo con la esperanza de obtenerla en su valor más bajo. Esto puede resultar en un movimiento ascendente el día siguiente.
Cómo interpretar el volumen
Otra métrica que verás cuando observes los gráficos de precios es el volumen. Hay dos tipos de volúmenes a considerar. Existe el volumen literal de ventas, que es la cantidad de monedas que se negociaron en el período que estás visualizando (diariamente, semanalmente, mensualmente, etc.), y luego está el volumen en dólares para ese período.
El volumen literal, la cantidad de monedas negociadas, a menudo aparece como una columna en la parte inferior de un gráfico de precios. La altura de esta columna actúa como un identificador visual del volumen, y el color indica si ese volumen tiende a ser más bajista (ventas) o alcista (compras). El volumen es importante, ya que muestra cuán serio es un mercado alcista o bajista. Cuanto mayor sea el volumen de comercio, mayor será la volatilidad que veremos en el precio. A los operadores les gusta la volatilidad porque ofrece la oportunidad de comprar a bajo precio y vender a un precio elevado.
Si queremos predecir si una tendencia alcista o bajista continuará durante un período prolongado, el volumen puede actuar como un indicador. Si el volumen de operaciones es alto y el precio está aumentando, entonces hay un impulso genuino en este cambio de precio. Por lo tanto, si estabas pensando en vender tu moneda, es posible que desees esperar con la expectativa de que la tendencia alcista continuará y posiblemente incluso comprar más en previsión de ese aumento.
Por supuesto, nunca se debe mirar sólo un indicador. Deberías buscar los patrones que se alinean a una serie de indicadores. Entonces, lo que puedes estar buscando no es solo un gran aumento en el volumen de transacciones, sino verlo combinado con una mecha larga en la parte superior de la vela. Esto indica que los alcistas (bulls) ya no están impulsando el precio hacia arriba, y los bajistas (bears) están comenzando una tendencia a la baja. En ese caso, podría ser un buen momento para vender.
Si el volumen de operaciones en general es bajo, entonces sugeriría que no hay mucha convicción en el mercado, por lo que cualquier cambio que veamos en el precio (hacia arriba o hacia abajo) es poco probable que continúe en el próximo período.
Si notas un aumento brusco y repentino en el volumen, que puede ocurrir alrededor de un gran anuncio, presta especial atención. Es probable que indique que está a punto de haber algún movimiento significativo en el precio de esa moneda hacia arriba o hacia abajo. Esto puede proporcionarte la información que necesitas para comprar o vender antes de que el mercado general se entere de que algo está sucediendo.
En cuanto al segundo tipo de volumen, el volumen en dólares para un período, este se relaciona con el precio de la moneda multiplicado por el volumen negociado. Esto nos permite comparar monedas de diferentes precios. Por ejemplo, un aumento brusco de un millón de operaciones en una moneda con un valor de 1 dólar puede parecer mucho, pero en realidad solo se ha realizado una operación de 1 millón de dólares. Por otra parte, un aumento de 100.000 transacciones de una moneda de 1.000 dólares es de hecho algo mucho más explosivo, ya que muestra que se han realizado operaciones por valor de 100 millones de dólares. La última moneda, a pesar de que cuenta con un volumen literal menor, representa en realidad un cambio más significativo, si estabas decidiendo entre las dos.
Promedios móviles
Si bien la búsqueda de tendencias de volumen y velas durante períodos cortos es una parte vital para predecir los movimientos de los precios, es peligroso considerar solo estas métricas. También debes observar los movimientos de los precios durante un período de tiempo mayor (días, semanas, meses, etc.) para asegurarte de que no seas engañado por el mercado para vender o comprar en el momento equivocado. Aquí es donde la media móvil entra en juego.
Hay dos tipos de promedio móvil que encontrarás al examinar los gráficos de precios: el SMA (promedio móvil simple) y el EMA (promedio móvil exponencial).
El SMA es, como su nombre lo sugiere, bastante simple. Muestra el precio promedio de cierre durante un período de tiempo determinado. Digamos que estás visualizando un período de siete días. El valor de SMA estaría representado por la sumatoria de precios de los últimos siete días, dividido por siete. Esta línea se mueve hacia arriba y hacia abajo a través de tu gráfico porque cada día se ve un nuevo precio de cierre agregado y un precio de cierre más antiguo disminuido. Es por eso que se considera una media móvil. El SMA ayuda a mostrar una tendencia a lo largo del tiempo en un mercado, eliminando toda la volatilidad en un período de 24 horas y, en su lugar, ofrece una vista panorámica del paisaje.
La forma en que vería estas líneas indicadas en un gráfico es SMA(7) o MA(7). El SMA / MA se explica por sí mismo, mientras que el número entre paréntesis representa el número de períodos que el promedio está teniendo en cuenta. Si estás visualizando un gráfico diario, entonces son siete días. Si se trata de un gráfico por hora, son siete horas.
La EMA es una media móvil ligeramente diferente y más complicada de explicar. Utilizando el ejemplo de siete días anterior, en lugar de tratar el saldo de cierre de cada día por igual (y simplemente dividir la suma total por siete), el gráfico EMA pondera cada día de forma diferente en función de su proximidad al día actual. Así que el día anterior tiene más peso que el día previo a este, y se le otorga importancia descendente a los días a medida que retrocedes en el período de siete días. La EMA es más reaccionaria y puede adaptarse más rápidamente a la volatilidad en el mercado.
Entonces, ¿cómo una media móvil te ayuda a leer el mercado? Muestra el soporte o la resistencia a comprar o vender a un determinado precio. Si el precio de cierre del día no puede superar el promedio móvil, sugiere que hay resistencia en ese punto donde la gente está vendiendo. Si supera la media móvil, respalda la idea de que es un mercado alcista y debes buscar una oportunidad para vender. Si el precio de cierre no puede caer por debajo de la media móvil, sugiere que hay soporte en forma de personas que compran a ese precio. Si cae por debajo de la media móvil, sugiere que el mercado se está moviendo hacia un período de tendencia a la baja y que podemos comenzar a ver algunas compras.
Una regla de oro cuando se trata de promedios móviles es que cuanto más largo es el período examinado, más fuerte es el indicador. Con eso en mente, nuestro ejemplo de siete días no es tan fuerte. Un análisis de 70 días proporcionaría una indicación más sólida de si el mercado está comenzando a moverse por encima o por debajo de la media móvil.
Una de las razones por las cuales esta forma de análisis técnico es bastante efectiva es debido a que los comerciantes la usan para establecer límites de compra y venta de monedas. Las ordenes límite son ordenes de compra y venta predeterminadas que se establecen dentro de una plataforma de intercambio, según las cuales un operador indica que comprará (o venderá) una moneda cuando el precio llegue a una cierta cifra. Como en un contrato inteligente, se activará automáticamente, sin intervención humana, cuando se alcance la cifra correcta.
Por ejemplo, imagina que el precio de una moneda es de 10 dólares, y el promedio móvil es de 15 dólares. Un trader puede generar una orden con una plataforma de intercambio que estipule una compra de 100 monedas cuando el precio llegue a 15 dólares. Esto se debe a que un movimiento como este sugeriría un mercado alcista y un probable aumento de precios más allá de ese valor. Por el contrario, si el precio de la moneda subió a 20 dólares, la media móvil aumentaría con ella, tal vez llegando a 17 dólares. En este punto, el trader puede establecer un límite de venta de 17 dólares, por lo que esas 100 monedas se venderán si el mercado muestra una tendencia bajista y retrocede por debajo de la media móvil.
En este escenario, el operador ha utilizado la media móvil como una guía para obtener una ganancia mínima de 2 dólares por moneda.
En última instancia, lo que estás tratando de hacer con una media móvil es predecir dónde el mercado ha establecido sus límites de compra y venta. Experimentar con diferentes períodos de promedio móvil y compararlos con las velas es la clave aquí. Si puedes ver que las mechas de las velas se extienden por encima o por debajo de la media móvil (dependiendo de en qué lado de la línea está el precio), pero el saldo de cierre no sobrepasa la línea, estarás viendo una indicación de soporte (sobre la línea) o resistencia (debajo de la línea) para ese precio. Esto se debe a que tan pronto como el mercado pasó ese punto, se activaron las ordenes, lo que hace retroceder el precio.
Esto te da una indicación de dónde se han establecido los límites de compra y venta del mercado.
Decidir si debes usar SMA o EMA depende del tipo de operación que desees realizar. En general, las SMA son más útiles si estás operando por periodos de tiempo más largos, por ejemplo semanalmente o incluso diariamente, ya que no reaccionan ante la volatilidad y ofrecen una visión más amplia del mercado. Para los operadores diarios que buscan cambios por hora (o incluso menos), la EMA puede detectar más rápidamente las fluctuaciones de los precios y las oportunidades de ganar dinero.
Cómo operar con la tendencia
Usando la información anterior como arma, ahora puedes comenzar a observar tendencias de mayor escala. Esto se define mejor por las mechas al final de nuestras velas. Al mirar un gráfico de precios, podrás observar la mecha más baja en ese período. Esto muestra el punto más bajo durante el período en el que se comercializó la moneda. Llamemos a ese punto A.
Ahora analiza los días a partir de esa fecha. Siempre que el punto bajo (el extremo de la mecha inferior) en un día determinado este por encima del Punto A, el mercado estará en una tendencia ascendente. A menudo tendrás que mirar los datos de meses o incluso años para ver si hay una tendencia al alza, ya que el mercado se consolidará y fluctuará de forma natural en oleadas de períodos más cortos (días o semanas). Pero en general, si esas mechas bajas siguen siendo más altas que el Punto A, estarás en una tendencia ascendente.
Naturalmente, la situación inversa es una tendencia a la baja. Si tienes, en tu visión de largo plazo, un punto alto bien definido, que llamaremos Punto B, y el extremo de la mecha superior sea consistentemente más baja que el Punto B en los días siguientes, tendrás una tendencia a la baja.
Operar con la tendencia significa que estás comprando al alza y vendiendo a la baja. Este es el objetivo general para aquellos que buscan ganancias a largo plazo con sus compras de monedas.
Cuando desees establecer una línea de tendencia en un gráfico, deberás hacer clic en dos puntos: el punto en el que está comenzando tu tendencia (la más baja o más alta) y el día actual. Sin embargo, para asegurarte de que una tendencia es de hecho real, tendrás que ver que al menos una de las velas entre estos puntos toque la línea. Este tercer toque hace que la línea de tendencia sea válida; si no puedes obtener eso, entonces el período que estás mirando no te da evidencia clara de una tendencia. Y si puedes obtener más de tres toques, estarás aumentando la validez de esa tendencia.
Es importante tener en cuenta que las tendencias pueden ser engañosas. Algo que se ve claramente como una tendencia a la baja en un período de 90 días puede, cuando se aleja a un período de 900 días, mostrarse como un período de consolidación en una tendencia al alza más grande.
¿Qué es el RSI (Índice de Fuerza Relativa)?
Como te puedes imaginar, existen múltiples formas de visualizar los datos de la gráfica de precios e interpretar las matemáticas. Estas diversas visualizaciones se llaman indicadores, y su principal motivo es ayudarte a llegar a un pronóstico de lo que puede suceder en el futuro de forma rápida y con mayor confianza.
Recuerda: un análisis técnico solo describe lo que sucedió en el pasado para ofrecer una sugerencia de lo que podría suceder en el futuro. ¡No predice con exactitud lo que sucederá!
Uno de los indicadores más populares que encontrarás es el Índice de fuerza relativa o RSI. El RSI analiza el momentum en el historial comercial de una moneda para tratar de predecir si está sobrecomprada o sobrevendida. Está representado por una escala de 0 a 100 (donde 100 es el extremo de sobrecompra) y revisa más de 14 períodos para establecer su número.
El índice de fuerza relativa se establece al observar las ganancias promedio durante un período de 14 días, dividido entre las pérdidas promedio. Es un indicador móvil, por lo que cada nuevo día es un nuevo período de 14 días, ya que el día más antiguo se cancela y aparece el día más reciente.
Una moneda se sobrecompra si hay un período prolongado de ganancias, y está sobrevendida si hay un período prolongado de pérdidas. Lo que esto nos dice es que el mercado estará listo para una corrección natural en los extremos del RSI. En general, una moneda se considera sobrecomprada si el RSI ha superado los 70, y sobrevendida si está por debajo de 30. Si, como parte de tu análisis técnico, ves que el RSI se encuentra en alguno de estos extremos, se respalda el argumento de que esta a punto de producirse una reversión en el mercado.
Si los volúmenes, las velas y los promedios móviles también respaldan este argumento, puedes comprar o vender con más confianza.
Como usar las barras internas o ‘inside bars’
También podemos usar velas para buscar la consolidación y el ajuste del mercado. Digamos que estamos viendo un gráfico diario. Si la vela de un día (incluidas sus mechas) es más pequeña que el día anterior y cabe dentro de su área, se llama una barra interior (inside bar). Muestra que el mercado se está consolidando. Así que, si un día una moneda alcanza un máximo de $10 y un mínimo de $5, y al día siguiente alcanza un máximo de $8 y un mínimo de $6, es una barra interior (está dentro del rango de $10 a $5 de su predecesor).
Si al día siguiente obtiene un máximo de $7 y un mínimo de $6.50, tienes un segundo día consecutivo de barras internas. Esto muestra que el mercado se está ajustando. Es importante tener en cuenta que, históricamente, un mercado en contracción es un indicador de que se avecina una ruptura. Una ruptura es un aumento abrupto en el volumen de operaciones, impulsando el precio de manera rápida y significativa, ya sea hacia abajo o hacia arriba. Ocurre cuando el mercado se ha ajustado hasta el punto en que los traders no están haciendo dinero, por lo que la situación se vuelve delicadamente equilibrada. Cuando un movimiento se hace en cualquier dirección, entonces tiende a ser grande.
Si está mirando las gráficas y observas un período de ajuste o consolidación, entonces puedes estar viendo las semillas de una ruptura. Esto podría continuar por días. Pero en el momento en el que la siguiente vela supera el rango de sus predecesores y no es una barra interior, es cuando puedes esperar una ruptura. Si la vela excede el punto alto del día anterior, será una ruptura alcista; si cae más allá del punto más bajo, será una ruptura bajista. Si este movimiento está respaldado por un gran cambio en el volumen de operaciones, tienes un buen indicador de que está ocurriendo un cambio de precio significativo.
¿Qué es el arbitraje?
Para la mayor parte de esta guía hemos explorado el gráfico de precios ya que es la forma más común de leer el mercado; sin embargo, no es la única forma. Una alternativa más común que un gráfico de precios es la tabla de precios. Muestra una lista de todas las monedas, indica si están subiendo o bajando, y cuáles son los puntos altos y bajos del día.
Más importante aún, también puedes ver cuáles son los precios de una moneda en diferentes bolsas. Por ejemplo, puedes ver que un intercambio podría estar comprando una moneda a $2.10, mientras que otro está vendiendo la misma moneda a $1.90.
Unos simples cálculos deberían decirte que si vas al segundo intercambio y compras monedas a $1.90, y luego, vas al primer intercambio y las vende a $2.10, hay un beneficio de 20 centavos que se puede obtener. Esta situación, una diferencia en el precio de una criptomoneda entre dos bolsas al mismo tiempo, se denomina arbitraje. Para el trader de ojos de águila con la capacidad de operar rápidamente, esta puede ser una gran oportunidad para ganar algo de dinero.
Sin embargo, debes ser cauteloso. Hay tarifas que cobran los intercambios por realizar estas transacciones, además, la necesidad de que se confirme una transacción en el blockchain pueden retrasar el proceso el tiempo suficiente para que se cierre la ventana de oportunidad antes de que se ejecute. Estos son solo dos factores a considerar y tener en cuenta antes de lanzarte a una oportunidad de arbitraje.
Conclusión
Aunque no es un reemplazo para el análisis fundamental, el análisis técnico es una herramienta de evaluación importante que puede ayudarte en el momento de tomar cualquier decisión de inversión.
A diferencia del análisis fundamental, el análisis técnico no tiene en cuenta el valor intrínseco de la moneda cuando intenta predecir los movimientos futuros de los precios. En cambio, el análisis técnico espera pronosticar momentos de precios a corto plazo basados únicamente en los datos de comercio pasados y el sentimiento del mercado.