Constantinopla, la próxima actualización de Ethereum a nivel de todo el sistema, llegará pronto a un nodo cercano a ti. Finalizado el 31 de agosto, Constantinopla incluye cinco propuestas diferentes de mejoras de ethereum (EIPs). Una vez liberadas en ethereum, las propuestas alterarán permanentemente la cadena de bloques con una gran cantidad de nuevas actualizaciones incompatibles con las anteriores.
Esto significa que los nodos – la red de ordenadores que ejecutan el software ethereum – deben actualizarse junto con todo el sistema o continuar funcionando como una entidad de cadena de bloques separada.
Más formalmente conocido como un «hard fork«, las mejoras en todo el sistema han instigado una gran cantidad de drama en el pasado. Más notablemente, en el caso de que una parte de los usuarios no esté de acuerdo con el cambio, esto puede resultar en dos versiones diferentes de la misma cadena de bloques funcionando simultáneamente.
Tan dramático como estas cosas pueden llegar a ser (habiendo resultado anteriormente en el surgimiento de una criptomoneda rival llamada ethereum classic), la mayoría de las actualizaciones previstas en Constantinopla no serán notorias para los usuarios promedios. De hecho, descrita por el desarrollador independiente Lane Rettig, la próxima bifurcación dura de ethereum no presentará ningún «gran cambio» para los usuarios finales en absoluto.
Descrita por Rettig principalmente como una «actualización de mantenimiento y optimización«, Constantinopla presenta pequeñas, aunque altamente técnicas, mejoras en la eficiencia de la red y en la estructura de tarifas, así como mejoras que preparan el camino para la tan esperada hoja de ruta de escalamiento de ethereum.
Además, el hard fork incluye cambios en la política económica subyacente de ethereum, y el retraso de la bomba de dificultad, un trozo de código programado para activar lo que se conoce como la «edad de hielo» (ice age) de ethereum, en la que la creación de nuevos bloques en la red finalmente se detiene por completo.
Como se detalla en CoinDesk, el cambio económico ha sido la causa de la contención, con puntos de vista opuestos expresados por la comunidad de ethereum en los meses previos a la actualización.
En estos momentos, la ansiedad sigue creciendo entre los mineros de la red que se enfrentan a un inminente recorte salarial después de la implementación de Constantinopla. Pero aún así, al lograr un equilibrio entre todas las preocupaciones de las partes interesadas, los desarrolladores confían en que la actualización será ampliamente bien recibida.
Aunque todavía no se ha finalizado un número de bloque formal, los principales desarrolladores y clientes están implementando, revisando y probando el código de Constantinopla.
Como dijo el comerciante de Ether Eric Conner a CoinDesk:
«La codificación y las pruebas complejas llevan tiempo. Y la blockchain de ethereum se ejecuta en vivo, así que es esencial asegurarse de que no haya interrupciones».
El nuevo Ethereum
Los cinco EIPs que serán liberados en Constantinopla son los siguientes:
- EIP 145: Una actualización técnica escrita por dos desarrolladores de ethereum, Alex Beregszaszi y Pawel Bylica, EIP 145 detalla un método más eficiente de procesamiento de la información en ethereum conocido como bitwise shifting.
- EIP 1052: Autorizado por el desarrollador principal Nick Johnson y Bylica, EIP 1052 ofrece un medio para optimizar la ejecución de código a gran escala en ethereum.
- EIP 1283: Basada en el EIP 1087, escrito por Johnson, esta propuesta beneficia principalmente a los desarrolladores de contratos inteligentes al introducir un método de fijación de precios más equitativo para los cambios realizados en el almacenamiento de datos.
- EIP 1014: Creado por el propio fundador de ethereum, Vitalik Buterin, el propósito de esta actualización es facilitar un cierto tipo de solución de escalado basada en canales estatales y transacciones «fuera de la cadena».
- EIP 1234: Esta actualización, liderada por Afri Schoedon, director de lanzamiento del cliente de ethereum Parity, es la más polémica del lote, ya que reduce la emisión de recompensas de la minería de bloques de 3 ETH a 2 ETH, además de retrasar la bomba de dificultad por un período de 12 meses.
Con todo, los cambios incluyen: optimizaciones de código para mejorar los tiempos de procesamiento para los desarrolladores; estructuras de precios más justas para los cambios realizados en el almacenamiento inteligente de datos de contratos; una edición de código que hace que las soluciones de escalado a través de los canales estatales sean más fáciles de realizar en ethereum; y cambios en la política económica de ethereum.
Dado que es probable que estos cambios en el código den forma al progreso de la segunda cadena de bloques más popular en los próximos años, vale la pena echar un vistazo más profundo a Constantinopla.
Nueva política económica
Posiblemente la más significativa de todas las mejoras sea EIP 1234, la última adición a las otras cuatro propuestas que se publicarán en Constantinopla y que deberá lidiar con el aumento gradual de la dificultad de los bloques mineros, conocida como la bomba de dificultad.
Originalmente concebido para fomentar la transición hacia un sistema de consenso más ecológico basado en proof-of-stake, llamado Casper, el cambio parece estar aún muy lejos. Como tal, se deben tomar medidas para retrasar la bomba de dificultad y reducir la emisión de ether junto con ella.
En pocas palabras, dada la remoción de la bomba de dificultad, los bloques serán más rápidos de explotar luego de la implementación de Constantinopla. Esto significa que se deben tomar medidas para reducir también la recompensa por bloque, y EIP 1234 los reduce de 3 ETH a 2 ETH por bloque.
Debido a que Ethereum no tiene una política monetaria formal – ya que actualmente mantiene un modelo de inflación sin limites – de acuerdo con un comerciante llamado Eric Conner, la reducción de recompensas en el EIP 1234 puede ser considerada como una «solución provisional» que tiene como objetivo frenar efectivamente una «hemorragia de oferta».
Schoedon, autor de EIP 1234, lo describió como «la mejor propuesta para estabilizar la emisión al mismo tiempo que retrasa la bomba de dificultad» en un correo electrónico a CoinDesk.
Aún así, algunos miembros de la comunidad minera de ethereum se opusieron a la decisión de reducir las recompensas de la minería, argumentando que los márgenes de beneficio más pequeños y el potencial de las operaciones mineras se centralizarían cada vez más en manos de unos pocos.
Las preocupaciones llegan en un momento en que los ASIC -un tipo de hardware para minería altamente competitivo que elimina a los aficionados de la industria minera- se están generalizando cada vez más en la minería de ethereum.
Qué sigue a continuación
En resumen, los cinco EIPs tienen impactos en ethereum que afectan a una serie de objetivos e iniciativas más amplias que aún deben ser elaboradas en la plataforma descentralizada, incluso después de que Constantinopla haya sido completamente liberado.
En la actualidad, cada EIP seguirá siendo sometido a pruebas, aplicación y revisión por homólogos en las próximas semanas, aunque el proceso no es en absoluto una progresión lineal.
Este aspecto de la preparación que tiene que ver con las pruebas y revisiones que se llevan a cabo en una bifurcación dura puede ser tan lento, si no más, que llegar a un consenso sobre una plataforma descentralizada.
Así que, a pesar de la fecha de lanzamiento original del 8 de octubre, el gran estreno del próximo hard fork de ethereum podría no llegar sino hasta más adelante en el mes o incluso en algún momento de noviembre.
Afortunadamente, el vistazo de los cinco EIPs que se incluirán en Constantinopla ha dado a los aficionados al ethereum y a los críticos por igual una buena idea de lo que se puede esperar.
Con información de CoinDesk
