Los discos de Xbox One por fin se pueden reproducir sin conexión tras los cambios introducidos en el impopular DRM de Xbox Series X.
Microsoft ha confirmado que una reciente actualización de la Xbox Series X ha cambiado una controvertida característica de DRM, y ahora se puede jugar a los discos de Xbox One en la consola de nueva generación sin necesidad de conexión a Internet.
Desde el lanzamiento de la Xbox Series X, la consola requería una conexión a Internet para poder jugar a los juegos de Xbox One en discos de venta al público. Incluso si has instalado ese disco en la consola, tendrías que estar conectado a Internet para poder lanzar el juego. (Esto técnicamente no es un problema para las consolas Series S, ya que no tienen una unidad de disco en primer lugar).
Este mes, los aficionados descubrieron que ya no es necesario este registro en línea. Ahora se pueden reproducir discos de Xbox One en la Series X sin necesidad de conectarse a Internet.
«Esto es cierto desde la actualización 2206», ha confirmado en un tuit Eden Marie, jefe de ingeniería de Xbox. «Hemos examinado los datos desde el lanzamiento de la Series X|S y hemos determinado que la comprobación de compatibilidad online no es necesaria en la gran mayoría de los casos para los discos de Xbox One. Es posible que algunos juegos aún necesiten ser actualizados en línea después de la instalación para garantizar la mejor experiencia.»
La serie de actualizaciones 2206 incluyó tres versiones, realizadas el 1 de junio, el 28 de junio y el 28 de julio de este año. Las notas del parche se componen principalmente de vagas «mejoras generales de estabilidad y rendimiento», por lo que no está claro cuándo se realizó exactamente el cambio de DRM.
Mientras que los discos dedicados de la Xbox Series X ya se podían reproducir en la consola sin necesidad de conexión a Internet, ese no era el caso de los títulos de la Xbox One. Se trata de un problema especialmente notable porque la gran mayoría de los juegos de Xbox Series X se lanzan en disco como títulos Smart Delivery. En la mayoría de los casos, los juegos Smart Delivery se envían con el código de Xbox One en el disco y requieren una descarga separada para la actualización de la Series X, lo que significa que, hasta esta actualización, no había forma de jugarlos en la nueva consola sin una conexión a Internet constante.
La Series X sigue requiriendo una conexión online para su configuración inicial, y los juegos retrocompatibles de Xbox y Xbox 360 se siguen descargando online y requieren una conexión a Internet incluso cuando se inserta un disco. Pero estos cambios hacen que una gran parte de la biblioteca de Xbox sea accesible para aquellos que no tienen una conexión online constante, y deberían mantenerlos disponibles incluso en caso de que los servidores de Microsoft se apaguen.
